Uno de los principales alimentos del cine es la misma historia y no hay mayor suceso en el Siglo XX en el cine en España que la Guerra civil.
Igual que el cine mundial, especialmente el de los países aliados, ha vuelto una y otra vez a las dos Guerras Mundiales, el cine español no ha cesado de mirar hacia la guerra civil de 1936 y todo lo que vino después.
Un deseo impulsado además por la imperiosa necesidad de equilibrar, corregir y reescribir el relato del cine propagandístico fascista que prosiguió desde la posguerra hasta la muerte del dictador. Pero, como gran germen y antecedente de la 2ª Guerra Mundial, no solo el cine español ha vuelto su mirada a esos convulsos años.
Todo el cine mundial, especialmente el francés y el mexicano, hogar de los refugiados españoles, y el americano, recordando a sus soldados de la Brigada Internacional que ayudaron a defender la República, han hecho cine de este trágico acontecimiento. En consecuencia, como suceso fundamental de la historia del cine y de España, repasamos las películas más destacadas, de toda época y país, sobre la Guerra civil española.
1) Tierra y Libertad (Ken Loach, Reino Unido, 1996)

Para comenzar esta serie de películas sobre la Guerra Civil española, es imprescindible hablar de este clásico del director británico Ken Loach. Una producción que a diferencia de muchas de las películas producidas en España, lo hace desde otra perspectiva diferente, desde un punto de vista muy sincero y también mostrando muchas partes del conflicto que no fueron tratadas en otras películas de la misma temática.
La película está inspirada por «Homenaje a Cataluña«, obra del autor George Orwell en la que este narra su experiencia en España durante la guerra civil española y las divisiones internas dentro del denominado bando republicano.
Los anarquistas, comunistas y socialistas tomaron posiciones muy diferentes durante el conflicto. Mientras los anarquistas luchaban por una verdadera revolución social sin líderes, amos ni patrones, pusieron en práctica sobre todo en la zona de Cataluña numerosas colectivizaciones de las tierras y avances pioneros para la época como fue la ley que permitió la legalización del aborto, la ayuda a muchas mujeres que ejercían la prostitución y la emancipación real de la mujer dentro de la sociedad, no solo de forma simbólica o propagandística.
Mientras que los comunistas y socialistas estaban muy influenciados bajo la órbita soviética, los anarquistas siempre se negaron en caer bajo una dictadura fuera de la ideología que fuera.
La película obtuvo el Premio Internacional de la Crítica de la FIPRESCI y el premio del Jurado Ecuménico en Cannes. También fue galardonada con el Premio Sant Jordi a la mejor película española.
2) Libertarias (Vicente Aranda, España, 1996)

La película comienza ambientada en la ciudad de Barcelona un día después del intento de golpe de Estado por el ejécito el 19 de julio de 1936, cuando el pueblo inicia un estallido de revolución social para constuir un mundo nuevo.
Un grupo de monjas huyen del convento a la llegada de un grupo anarquistas de la CNT , y una de ellas, María, se refugia en un burdel donde la protegen y ocultan.
Unas milicianas anarquistas de la asociación “Mujeres Libres” irrumpen en un burdel con la misión de liberar de la esclavitud de la prostitución a varias mujeres que allí ejercen. Pronto las convencen y dejan todo para unirse a su lucha, al principio con algunas dudas e incertidumbres.
Estas milicianas liberan también a María quien se une al grupo y participará en la lucha armada en el frente del Ebro cerca de Zaragoza, donde vivirá las aventuras de la guerra.
Esta película refleja no sólo una de las guerras más significativas para la historia de España, sino también las injusticias de una sociedad en donde las mujeres debieron alzar la voz para conseguir ser escuchadas.
La asociación anarquista de “Mujeres Libres” se rebeló contra la idea de que la revolución era cosa de hombres, y quiso garantizar su lugar en la discusión acerca de los roles en el porvenir, una vez finalizada la batalla.
Fueron inumerables las acciones de esta asociación de mujeres: como la organización de asambleas, campañas de alfabetización, contabilización e inventario de material y alimentos para el frente, improvisación de cuerpos de enfermería para la pronta atención de heridos, entre otras.
3) Federica Montseny, la dona que parla (Laura Mañá, España, 2021)

Tuvieron que pasar muchos años para que una de las personalidades más sobresalientes e imprescindibles de la historia del movimiento anarcosindicalista en España fuera al fin protagonista de una propia película: Federica Montseny.
«La dona que parla» es la historia del conflicto interno de una mujer valiente e idealista con unas convicciones muy actuales, como un puente entre su figura y el presente para recordar que nunca se tiene que dejar de luchar por lo que uno cree justo.
Por la entidad de la protagonista de esta película, la olvidada y notable personalidad y trayectoria de sus padres (Taresa Mañé y Juan Montseny, propulsores de la Revista Blanca y notables activistas libertarios), la azarosa época en que vivió y el conflicto que la hizo aceptar un cargo ministerial en contra de sus ideas, así como por los riesgos y peligros que soportó durante su exilio en la Francia ocupada por los nazis, presenta la figura de una mujer comprometida con la lucha de la emancipación social.
4) La hora de los valientes (Carlos Saura, España, 1998)

5) Las 13 rosas (Emilio Martínez-Lázaro, España, 2007)

Esta película narra la represión basada en una historia real cuando la entrada en Madrid de las tropas de Franco, termina la guerra civil española. Temiendo la sangrienta represión que se avecinaba, muchos republicanos y anarquistas huyen del país pero otros no pueden o no quieren. Como las 13 jóvenes protagonistas de esta historia.
Franco promete que solamente serán castigados los que tengan las manos manchadas de sangre. Y ninguna de esas chicas las tiene. Como Carmen, por ejemplo, de 16 años, que militaba en las Juventudes Socialistas pero nunca tuvo un arma. Ni su amiga Virtudes, que servía en casa de unos nuevos ricos franquistas y pasó la guerra dando de comer a ancianos y niños en el Socorro Rojo. O Julia, una cobradora de tranvías, que se había afiliado a las Juventudes Socialistas para poder hacer deporte en las instalaciones de la sede.
Y el caso de Blanca Brisac, hija de un judío francés, es más evidente todavía. Es católica, votante de la derecha, madre de un hijo y que ha acudido a ayudar económicamente a un músico, militante comunista, compañero de orquesta de su marido.
Eran muchachas jóvenes, con ilusiones, que tenían novio, que iban al cine o a bailar y se divertían como podían en aquellos duros y grises días de la posguerra.
Las detuvieron al mes de acabar la guerra. Algunas se conocían entre sí pero otras no. Sufrieron duros interrogatorios policiales y finalmente fueron trasladadas a la cárcel de Ventas donde había miles de mujeres hacinadas en las celdas de la presión.
A las 13 detenidas, las incluyen en la misma causa bajo la acusación de ayuda a la rebelión y haber planeado un atentado contra Franco, un atentado irreal pero que daba base a la acusación. Todo muy abstracto, sin pruebas. Ellas y sus familiares estaban tranquilos, a lo máximo les caerían unos cuantos años de cárcel.
Pero unos días antes de que se celebrara el juicio se produjo un atentado contra un militar franquista en el que mueren tres personas. Nada tienen que ver con ello las 13 jóvenes porque estaban en la cárcel cuando ocurrió todo. Pero se fraguó una venganza y el Tribunal Militar las condena a muerte y en menos de 48 horas fueron fusiladas sin piedad alguna.
Carmen, la más joven de todas, fue la única superviviente, escuchó desolada los trece tiros de gracia desde la ventana de su celda.
6) ¡Ay Carmela! (Carlos Saura, España, 1990)

7) Las bicicletas son para el verano (Jaime Chávarri, España, 1984)

8) Pájaros de papel (Emilio Aragón, España, 2010)

9) Los girasoles ciegos (José Luis Cuerda, España, 2008)

10) Mientras dure la guerra (Alejandro Amenábar, España, 2019)
